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miércoles, 11 de agosto de 2010

EL AMOR JAMAS PASARA: Segunda parte.

Traducción: Luis Eduardo Cantero, Argentina
2. CONOCIENDO EL IMPERIO ROMANO
En el año 63 a. C., Roma toma a Jerusalén y, a partir de allí, Judea se torna provincia romana. En el tiempo de Pablo, es el Imperio romano que domina a Judea y muchas otras regiones. La base económica del imperio es el comercio y la explatoción del trabajo esclavo, hay trabajadoras y trabajadores libres: artesanos independientes, pequeños campesinos y pescadores que trabajan para garantizar su propio sustento. Sobre ellos, el imperio hace pesar su mano de hierro, exigiendo el pago de impuesto, el trabajo forzado y el servicio militar. Ese modelo económico produjo un gran número de pobres.
Por otro lado, tanto en Roma como en las provincias del imperio existe un estrato social: rico: nobles, aristócratas, sacerdotes, magistrados, jueces, alta clase de administradores y generales; además, grupos que se benefician del modelo económico imperial, que mantienen su riqueza como sus privilegios a costa de las capas más pobres de la sociedad. Esta elite monopoliza la información y usa en provecho propio los recursos financieros que el poder central establece para las obras y mejoras, maniobra todo a su favor. Este método de administración es conocido por el nombre de patronato, modelo que abarca todas las relaciones sociales, desde el imperio hasta los estratos sociales más pobres. El emperador como el gran protector beneficia a los administradores y las elites locales con otorgar cargos, títulos de honra y títulos de tierra. De esta forma, crea lazos de gracias, sumisión y dependencia. Es el mismo se da que los administradores locales y las personas ricas de diferentes ciudades y provincias, que hacen pequeñas satisfacciones a otras de estrato social inferior, formando una red de dependencia y control social. Y la relación patronato/cliente sin perpetuar. Por ende, el patrono debe ser honrado públicamente y su nombre debe ser respetado en la ciudad, una vez que realiza obras en beneficio publico.
Otro recurso que el imperio romano utiliza para expandir su poder y mantener el control social es la divinización de la imagen del emperador, exhibido en monedas, broches, tazas, estatuas, altares y foros. Juntamente con esta práctica, las elites de las ciudades y de las provincias promueven cultos, sacrificios, juegos, fiestas y festivales en fechas significativas de la vida del emperador, creando un aura divina en torno de su imagen. Es bueno recordar que el título de Augusto, utilizado por el emperador, significa “venerable”. Esta estructura imperial logra mantenerse por más de 300 años. ¿Cómo es esto posible, ya que la población es bastante diversificada, presenta costumbres y culturas mucho diferentes y el gobierno cobra tazas y tributos elevados? Además, del sistema patronal y el culto oficial al emperador, el imperio romano posee un ejército bien equipado y bien pago que garantiza su estabilidad. Estas son algunas funciones del ejército imperial:
• Favorecer las conquistas romanas, obligando a las provincias dominadas a sostener la riqueza de Roma.
• Controlar la población libre y la población esclava
• Establecer la Pax Romana, es decir eliminar los focos de resistencias y las rebeliones, por medio de la fuerza, garantizando la recaudación de tributos.
Otro factor importante en la manutención y cohesión del imperio romano es la facilidad de transportes. Las grandes carreteras y un sistema marítimo seguro funcionan como verdaderas vías de acceso, favoreciendo el desplazamiento de las legiones de soldados, permitiendo la circulación de informaciones de modo rápido y agilizando tanto el transporte de mercaderías como el cobro del impuesto. Por estas carreteras y mares se desplazaban muchos misioneros, incluyendo a Pablo que llega a Corinto en su segundo viaje misionero. Vamos caminando con él a la ciudad para conocer y procurar entender al pueblo que allí vive.
3. CONOCIENDO LA CIUDAD DE CORINTO
Corinto, además de ser capital de la provincia de Acaya, es la ciudad más rica de Grecia y una de las más importantes del Imperio Romano. Destruida por primera vez en 146 a. C., por el ejército de Roma, fue reconstruida en el gobierno de Julio Cesar en el 44 a. C., pasando a condición de colonia. La ciudad posee una posición geográfica privilegiada, con dos puertos: el de Cencrea ubicado en el mar Egeo, y el de Lequeo que da acceso al mar Adriático. La travesía de un puerto a otro ofrece peligro, como los fuertes vientos que empujan la embarcación a una gran pared de rocas destruyéndolas. Ese problema se resuelve de la siguiente manera: cuando llega un buque (barco), se empuja por tierra hasta el otro puerto, en un trayecto de seis kilómetros. Trabajo duro y doloroso, realizado por un gran numero de esclavos.
Mirando a las ciudades de la región, es fácil ver que Corinto es una ciudad esencialmente comercial: mucha mercadería circula por vía marítima y terrestre. Muchos comerciantes y empresarios pasan en su camino hacia otras ciudades. Quien en ella se hospeda disfruta el negocio de su belleza: Templos, gimnasios, impresionantes edificios públicos y monumentos hermosos. Con una población estimada alrededor de 300 mil habitantes, siendo la mayoría esclavas y esclavos, Corinto puede ser comprada a una gran “colcha de retazos”, por su diversidad de pueblos y costumbres. También, desde tiempos antiguos, ganó fama de ser una ciudad de investigación. El dicho “Vivir al estilo de Corinto” es bien conocido, y muchos van allí a disfrutar de libertinaje y momentos de placer.
La población vive del comercio, de la producción artesanal, del trabajo agrícola, de las funciones administrativas y de la industria del bronce, orgullo de la ciudad. Otra fuente de renta importante son los juegos locales, especialmente la olimpiada que se realizan cada dos años y atraen a muchos turistas y atletas, moviendo la economía. El imperio, por medio de su política económica, sabe sacar provecho de todas estas actividades: Cobra, con mano fuerte, las tasas y los impuestos, lo que lleva a pequeños comerciantes y productores rurales a la quiebra. Los ricos se mantienen en buena posición, pues ellos son los dueños de la tierra y hacen parte de la red comercial. Eso hace crecer, cada vez más, la diferencia entre ricos y pobres
En una ciudad tan grande y con tantos problemas sociales, las personas se sienten aisladas y sus necesidades no son tenidas en cuenta. Una forma de superar ese aislamiento y hacer sus valores como personas, es crear asociaciones y confraternidades que promociones la honra y los valores de las personas pobres que participan. Estos grupos se forman con las diferentes finalidades. Como: culto a alguna divinidad; reunión de personas que ejercen la misma actividad profesional; garantizar los servicios fúnebres y preservación de la memoria de las personas muertas; apoyo financiero a los miembros más necesitados de la asociación o confraternidad.
Una de las características notables de Corinto es la pluralidad de experiencias religiosas. Usted puede encontrar en la ciudad manifestaciones de la religión tradicional y al mismo, las nuevas religiones de misterio venida del Oriente. Estas ofrecen a los iniciados diferentes maneras de experimentar el éxtasis espiritual y vencer las fuerzas malignas del universo. En la astrología el destino de las personas es determinado por los astros, el culto a diversos dioses y diosas, la diversidad de iglesias y rituales hacen de Corinto un gran mercado religioso. En medio de esta realidad, algo nuevo se desarrolla en la ciudad: la comunidad cristiana de Corinto. Vamos a conocer esta comunidad brillante de la que llevó a Pablo a escribir: “Doy gracias a Dios sin cesar por vosotros. Así como el testimonio de Cristo se ha hecho fuerte en vosotros” (1 Cor. 1, 4. 6)
Continuará...

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