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sábado, 30 de marzo de 2013

Tres tareas del papa Francisco

Por. Leonardo de Chirico, Italia*
 La elección del Cardenal Bergoglio al papado responde a tres asuntos fundamentales que el cónclave consideró que era necesario abordar. Estos argumentos ayudaron a dibujar el perfil del nuevo Papa y el Cardenal Bergoglio encajaba en el mismo.  En su primer y corto discurso frente a la multitud que le aplaudía en la Plaza de San Pedro, la figura más citada fue la de la Virgen María a quien se encomendó él y su predecesor.
Su primera cita en su primer día de papado fue una visita a la basílica mariana de Sta. María la Mayor de Roma para pedir a María su guía y su ayuda. Una manera más jesuítica que franciscana de empezar un papado.
LA TAREA TRANSICIONAL
Nadie en la curia dirá nunca que el reinado de Benedicto XVI fue un fracaso. Sin embargo, la impresión es que la elección del Papa Bergoglio es un reconocimiento implícito de que el papado anterior no logró todo lo que de él se esperaba, especialmente en lo referente al principal punto de la agenda, es decir, las relaciones con el Occidente laico. Tras ocho años de reinado de Benedicto, el Occidente secular se ha vuelto más distante de la Iglesia y también más crítico con la misma. Además, la Iglesia curial ha dado el más pobre resultado en términos de falta de normas cristianas. Por consiguiente, la Iglesia necesitaba un Papa diferente.
Entre el tradicional y todavía secularizado Occidente y el vibrante, aunque todavía “joven”, Sur Global, el cónclave ha escogido la clásica “via media”, o “camino del medio”.
El Papa Bergoglio nació en Argentina en el seno de una familia italiana. Es latino americano pero con orígenes europeos. Encarna la transición entre el “establishment” occidental y el fervor de los habitantes del Sur. Tal vez el cónclave creyó que si elegía a un Papa africano o asiático habría resultado un tramo demasiado largo e injustificado. Por otra parte, adherirse a otro Papa europeo habría sido demasiado de un movimiento geopolítico conservador que la Iglesia no puede soportar. El Papa Bergoglio es una figura intermedia. Diferente pero no extraña. Parecida pero no es una réplica.
También es una figura de transición en cuanto a su edad(76 años). No es un Papa “joven” con la expectativa de un papado largo, ni es tampoco un Papa “anciano” con poco tiempo por delante. Su papado pondrá a prueba la voluntad de la Iglesia de Roma
de ir más allá de la posición inmovilista de los años recientes, pero puede que no tenga el tiempo suficiente para ver realizados los cambios. El cónclave no encomienda largos papados a la Iglesia Católica (como el de Juan Pablo II), pero en cambio ha optado por mantener el futuro a la vista, a la espera de ver como se desarrollará este papado. Al mismo tiempo la jerarquía se reserva el derecho de hacer cambios si lo considera necesario.
Al Papa Bergoglio se le presenta como un “outsider”, pero en realidad no lo es. Apoyado por el Cardenal Martini, Bergoglio fue finalista en el cónclave de 2005, en el que Ratzinger se convirtió en Benedicto XVI. Es bien conocido por los cardenales y fue aparentemente considerado “fiable” por el cónclave.
En la lista de los principales candidatos antes del cónclave estaba el brasileño Scherer, otra figura transicional. A Scherer, no obstante, se le percibía al parecer muy implicado en la política de la curia romana para ser capaz de liberarse de sus maniobras. Bergoglio está integrado pero no está vinculado corporativamente con el mundo curial.
LA TAREA APOLOGÉTICA
El nombre escogido por el Papa Jesuita es Francisco. Mencionó que Francisco es una referencia a Francisco de Asís (1181-1226). La prensa internacional acentuó mucho este simbolismo franciscano y, por lo visto, le gustó. Aparentemente combinará la agudeza jesuita con el énfasis en la pobreza y la austeridad. Esta decisión tiene que ver con la voluntad de marcar una transición apologética tratando de conquistar el mundo moderno.
Ratzinger se dirigió al mismo dando conferencias como un profesor, pero a Occidente no le gustan los maestros individualistas y verticalistas. Ratzinger argumentaba sus posiciones de una forma muy hábil e intelectual, pero Occidente prefiere las celebridades que puedan encender su imaginación. Ratzinger denunciaba el relativismo moral de nuestros días, pero a Occidente no le gusta la gente que no practica lo “políticamente correcto” de aceptarlo todo. La estrategia de Ratzinger terminó en inmovilismo.
El Papa Francisco comenzó su papado con un estilo apologético muy diferente. Accesible, normal, corriente, le gusta estar con la gente, hablar su lenguaje y hacer su mensaje sencillo. Ratzinger subrayaba “la fe y la razón”, en cambio Francisco es probable que ponga el énfasis en “la misericordia y la sencillez”. Ratzinger se dirigía a Occidente como teólogo; Francisco es posible que insista en la humanidad común de todos. La diferencia es significativa.
¿Llegará la Iglesia a ser pobre y mansa? ¿Dará prioridad a un estilo de vida más sencillo? ¿Pondrá un mayor énfasis en sus labores espirituales que en sus intereses seglares?
Una cosa que debe recordarse es que Francisco de Asís no quería reformar toda la Iglesia, sino que deseaba obtener el derecho, por parte de la iglesia oficial, de vivir en la pobreza con su círculo de amigos. Anhelaba un lugar apropiado para proseguir con sus ideales evangélicos, dejando intacto el aparato de la iglesia imperial. La Iglesia de su tiempo le dio de buena gana lo que quería porque no se sentía amenazada por él.
Veremos si el Papa Francisco conseguirá que la pobreza evangélica deje de ser un lugar de unos pocos idealistas y se convierta en el estándar de la Iglesia mundial. Si es éste el caso, tendrá que examinar a Pedro Valdo (1140-1218) a quien le gustaba que Francisco practicara la pobreza evangélica, pero desafió a la iglesia oficial a hacer lo mismo. Francisco fue integrado y Valdo fue perseguido.
LA TAREA GEOPOLÍTICA
Un pensamiento final sobre el significado geopolítico de la elección. El Papa Bergoglio viene de un país donde, en las últimas décadas, el statu quo secular , que vio el catolicismo romano siendo la religión dominante, ha sido sacudido por el crecimiento de las iglesias evangélicas y nuevos movimientos religiosos de varias clases.
Este fenómeno diseña una nueva geografía espiritual del país. Lo mismo puede decirse de otros países latinoamericanos. Es interesante que la Iglesia Católica elija un Papa procedente de América Latina y le encomiende la misión de supervisar y presidir este espacio religioso continental que ha llegado a ser diluido por no decir débil. La respuesta tradicional al crecimiento numérico de los evangélicos ha sido etiquetarlos como “sectas” y “cultos”, pero este enfoque despectivo no detiene a los millones de personas que abandonan la Iglesia Católica. Ahora, el mismo Papa estará directamente implicado en rescatar el continente.
Algo importante está sucediendo en América Latina y el riesgo de perder el continente hizo que se considerara la necesidad de encauzarlo al más alto nivel.
El Papa Francisco es una figura de transición. El tiempo demostrará de qué forma será latinoamericano, curial, jesuita y franciscano.

Traducción: Rosa Gubianas
©Protestante Digital 2013
 
EL PAPA FRANCISCO REZA A LA VIRGEN CON BENEDICTO XVI

miércoles, 27 de marzo de 2013

Bergoglio versus ‘Página 12’

Por. Leopoldo Cervantes-Ortiz, México*  
El Vaticano denunció una “campaña difamatoria bien conocida” por parte de “una izquierda anticlerical”, con lo que, sin mencionarlo por su nombre, se acusaba indirectamente al diario Página 12.  En los momentos más saturados de información por la cercanía del acontecimiento y mucho antes de que comenzaran a apagarse los ecos del nombramiento del cardenal Jorge Mario Bergoglio en Roma para que todo volviera a la “normalidad”, un episodio que llamó poderosamente la atención en todo el mundo fue la conferencia de prensa presidida por el vocero del Vaticano Federico Lombardi el viernes 15 de marzo para aclarar la actuación del nuevo papa durante sus días de superior jesuita en la época de la dictadura militar.
Allí, se denunció una “campaña difamatoria bien conocida” por parte de “una izquierda anticlerical”, con lo que, sin mencionarlo por su nombre, se acusaba indirectamente al diario Página 12 , que había publicado diversas informaciones sobre las acciones de Bergoglio en relación con el secuestro de dos sacerdotes jesuitas. “(Las denuncias) son hechos antiguos no probados y a la vez con una fuerte carga ideológica”, afirmó Lombardi. [1] El comunicado agrega: “La campaña contra Bergoglio es bien conocida y data de hace varios años. Es llevada adelante por una publicación que realiza campañas calumniosas y a veces difamatorias. El carácter anticlerical de esta campaña y de otras acusaciones contra Bergoglio es bien conocido y obvio”. [2]
Al día siguiente de la citada conferencia de prensa, el periódico reaccionó con un par de textos que responden enérgicamente a las acusaciones vaticanas: “Una desmentida que no alcanza a desmentir”, de Eduardo Febbro, y “Papas”, de Luis Bruschtein.
El primero señala: “El afable portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, barrió con un revés de la mano los indicios y sospechas que pesan sobre la Iglesia y el papa Francisco, a propósito de su actuación blanda durante la última dictadura argentina. […] Defendiendo al Papa, Lombardi extendió su argumento al resto de la Iglesia como si ya no estuviese más que probada la implicación de la jerarquía católica argentina y vaticana en el ocultamiento de las violaciones a los derechos humanos y la colusión con los crímenes de la dictadura”. [3]
El segundo es muy incisivo:
Hay algo desproporcionado en tener un papa argentino, es algo que impresiona y no deja de sorprender. Y también es desproporcionada la conferencia de prensa del Vaticano contra Página/12. Todo parece llevado a una escala casi galáctica. […]
En realidad, no se trata de una izquierda anticlerical —seguramente en el diario habrá más de uno—, sino de dos sacerdotes jesuitas que fueron secuestrados y torturados durante la dictadura, y ya en democracia hicieron esas denuncias, a las que se sumaron los familiares de otros laicos, militantes cristianos, que fueron secuestrados en esa oportunidad, la mayoría de los cuales continúan desaparecidos. […]
En todo caso, la actuación del entonces jefe de los jesuitas, Jorge Bergoglio, se encuadró en la actitud de toda la cúpula de la Iglesia, en este caso sí de complicidad con los jefes militares, al aceptar calladamente la práctica de horror y exterminio que estaban llevando a cabo.
Todas estas situaciones fueron publicadas por Página/12 y afirmar que se trata de una “campaña de desprestigio” orquestada por “una izquierda anticlerical” constituye una pobre defensa. No se trata de un argumento sostenido con pruebas que puedan demostrar que no ocurrieron los hechos cuyo relato les ofende. Después de la dictadura, la Iglesia argentina quedó “en capilla”, como se suele decir. […]
En ese sentido no ha sido la decisión más feliz del nuevo papa Francisco encarar su relación con los derechos humanos como jefe de la Iglesia con esta desmentida pobre, que además no desmiente nada sino que agrede al mensajero, al medio que publicó una información que no estaba oculta, sino que ningún otro quiso publicar. Estaríamos fritos si hablar de los derechos humanos fuera solamente una prerrogativa de sectores de izquierda anticlerical. Desde el punto de vista del desarrollo histórico de este país, los derechos humanos pasaron a tener una importancia fundamental y les fue mal a los que intentaron negar esta realidad, en especial a la Iglesia argentina, que tendría que haber ocupado el mismo lugar que ocupó la Iglesia de Chile en este aspecto. Si fue un error, nunca es tarde para subsanarlo.[4]
Quien escribe esto se dio a la tarea de recopilar los artículos y notas publicados por dicho periódico bonaerense (un expediente de más de 100 páginas), para constatar la manera en que un medio informativo del propio país de Bergoglio fue capaz de transmitir, valientemente y con una búsqueda incesante de la objetividad, ausente en otros espacios, los aspectos más controvertidos y visibles del nombramiento. Página 12, en ese sentido, ha manifestado la misma postura crítica y fruto de un análisis muy contextual de los sucesos ligados a la figura de Bergoglio. Paso a reseñar brevemente el pulso informativo con que este diario siguió los acontecimientos incluso antes del nombramiento del cardenal.
Martín Granovsky escribió “Papa de Sudamérica, no gracias”, un texto en donde revisa a los candidatos de la región, sin mencionar siquiera a Bergoglio. Sus palabras son duras: “Un papa latinoamericano como el brasileño Odilo Scherer o como el argentino Leonardo Sandri, ex auxiliar del secretario de Estado Angelo Sodano, virtual primer ministro de Juan Pablo II, no suenan como la mejor ayuda para separar del todo a la Iglesia, o a las iglesias, respecto del Estado, y tampoco parece que fueran a obrar de estímulo para los cambios que se producen en los dos grandes países de Sudamérica desde 2003. Ojalá que ningún cardenal de América latina llegue a Papa”.
Ya sabido el nombramiento, Fernando Cibeira publicó el 14 de marzo “Errar es divino” , que también insiste en el pasado oscuro de Bergoglio. El mismo día, Horacio Bervitzky, quien le ha dado seguimiento a la polémica del trato del cardenal con la dictadura, incluso con un libro dedicado al tema (La mano izquierda de Dios. La última dictadura (1976-1983), escribió “Un ersatz”, que señala irónicamente la posibilidad de que en su nuevo puesto Bergoglio sea capaz de “apostrofar a los explotadores y predicar mansedumbre a los explotados”. Y añade: “Su biografía es la de un populista conservador, como lo fueron Pío XII y Juan Pablo II: inflexibles en cuestiones doctrinarias pero con una apertura hacia el mundo, y sobre todo, hacia las masas desposeídas. Cuando rece su primera misa en una calle del trastevere o en la stazione termini de Roma y hable de las personas explotadas y prostituidas por los poderosos insensibles que cierran su corazón a Cristo; cuando los periodistas amigos cuenten que viajó en subte o colectivo; cuando los fieles escuchen sus homilías recitadas con los ademanes de un actor y en las que las parábolas bíblicas coexisten con el habla llana del pueblo, habrá quienes deliren por la anhelada renovación eclesiástica. En los tres lustros que lleva al frente de la Arquidiócesis porteña hizo eso y mucho más. Pero al mismo tiempo intentó unificar la oposición contra el primer gobierno que en muchos años adoptó una política favorable a esos sectores, y lo acusó de crispado y confrontativo porque para hacerlo debió lidiar con aquellos poderosos fustigados en el discurso”.
Washington Uranga, a su vez, se refiere a él como un estratega político y, en otro texto, como “administrador ordenado”. En esa línea, Pedro Lipcovichentrevista al sacerdote Eduardo de la Serna, quien habla también de sus movimientos políticos y su muy adecuado manejo del poder. De la Serna también se expresó con dureza: “Bergoglio tiene aspectos muy negativos. En el tema derechos humanos, pesa sobre él la sombra de los dos jesuitas desaparecidos en la ESMA: hay firmes sospechas de que participó activamente en eso, tal como se detalló en notas periodísticas de Horacio Verbitsky (en Página/12 ). Esto no parece haberles importado a los cardenales. Tampoco vamos a esperar que Bergoglio aliente la Teología de la Liberación. Pero, sin embargo, en la diócesis de Buenos Aires ha sabido ser pastor. Después de arzobispos que eran “príncipes de la Iglesia” como Caggiano, Aramburu o Quarracino, Bergoglio está dispuesto a acercarse a la gente: ha lavado los pies de enfermos de sida, de embarazadas en la Maternidad Sardá, bendijo a cartoneros en plaza Constitución. Son cosas positivas, después de un papa tan lejano como Benedicto XVI, que nunca vio un pobre en su vida. Políticamente, Bergoglio viene de la agrupación peronista Guardia de Hierro; a diferencia de Aguer, es capaz de tomar mate con la gente, insiste en que los curas vayan a los barrios, pone curas villeros. Ahora habrá que prestar atención a dos cosas. Una: a quiénes nombrará Bergoglio en la curia vaticana, que es un antro mafioso; suele pasar que inicialmente se confirmen los que están, pero puede ser que lentamente empiece a haber cambios. La segunda cuestión es quién será designado arzobispo de Buenos Aires: es de esperar que Héctor Aguer haya concluido su carrera eclesiástica” .
El paquete informativo del jueves 14 de marzo lo completaron una entrevista al embajador argentino en El Vaticano, Juan Pablo Cafiero, la pregunta de Martín Granovsky, cuestionando las poses iniciales de Bergoglio: “¿Alcanza con ser sencillo?”, y las observaciones de Mariana Carbajal sobre los eventuales cambios en la Iglesia católica, así como los “discursos de la santa crispación”, es decir, los virulentos ataques del cardenal argentino a decisiones gubernamentales recientes.
Pero el panorama periodístico es mucho más amplio, por lo que continuaremos esta revisión.
Todo empezó, recientemente, con la nota de primera plana del 27 de mayo del año pasado (acompañada de una foto en la que Videla recibe la hostia de manos de un obispo) sobre el hecho de que la Iglesia Católica argentina reconoció ante la justicia que por lo menos desde 1978 sabía que la dictadura asesinaba a los desaparecidos. Luego, con notable clarividencia, el mismo día de la ascensión de Bergoglio, y con una portada dedicada a la condena perpetua para Reynaldo Bignone, último presidente de la dictadura,

[1] “El Vaticano denunció una ‘campaña difamatoria’ contra Bergoglio”, en Página 12, 15 de marzo de 2013, www.pagina12.com.ar/diario/ultimas/20-215879-2013-03-15.html . [2] “El texto del comunicado del Vaticano”, en Página 12, 16 de marzo de 2013, www.pagina12.com.ar/diario/elpais/subnotas/1-62832-2013-03-16.html . Cf. Alejandro Gutiérrez, “Deslinda el Vaticano a Bergoglio de la dictadura argentina”, en Proceso, México, 15 de marzo de 2013, www.proceso.com.mx/?p=336310&utm_source=feedburner&utm_medium=feed&utm_campaign=Feed%3A+revista_proceso+(Revista+Proceso) . [3] E. Febbro, “Una desmentida que no alcanza a desmentir”, en Página 12, 16 de marzo de 2013, www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-215950-2013-03-16.html [4] L. Bruschtein, “Papas”, en Página 12, 16 de marzo de 2013, www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-215951-2013-03-16.html.

*Autores:Leopoldo Cervantes-Ortiz

©Protestante Digital 2013

domingo, 24 de marzo de 2013

“Jesús nos llama a dejar la comodidad y buscar su mano en medio de la tormenta”

Por. Arzobispo Justin Welby, Inglaterra.
Justin Welby fue entronizado como el 105º Arzobispo de Canterbury, y por tanto nuevo líder de la Comunión Anglicana en una colorida ceremonia con bailarines africanos, música Punjabi e himnos tradicionales.Welby, de 57 años, tomó posesión ante una congregación de la que formaban parte el heredero al trono, el príncipe Carlos, el primer ministro David Cameron y otras figuras, así como casi todos los Obispos de la Comunión, representando a unos 80 millones de fieles.
Por primera vez en la historia de la Iglesia Anglicana, quien le entronizó en la cátedra diocesana fue una mujer, la arcediana de Canterbury Sheila Watson. Luego Welby fue entronizado en el sillón de San Agustín, en este caso por el decano Robert Willis.
Predicando ante unas 2.000 personas en el interior de la Catedral y ante muchos millones que seguían la ceremonia por los medios de comunicación, el ya Arzobispo Justin Welby pronunció su primer discurso, centrado en el valor y la importancia de seguir el llamado de Jesús.
Su reflexión se centró en el episodio del evangelio en el que Jesús llama a los discípulos a abandonar el barco y caminar sobre las aguas. El Arzobispo recordó las palabras de Jesús: “¡Ánimo, soy yo, no tengáis miedo!”, que fueron repetidas varias veces a lo largo de la predicación.
SEGUIR EL LLAMADO DE CRISTO
Welby dijo que se identificaba con Pedro saltando al agua al dar este paso con “temor y temblor”, para enfatizar que “nuestra respuesta al llamado de Jesús define los patrones de nuestra vida, de la Iglesia, y del conjunto de la sociedad”.
El Arzobispo de Canterbury remarcó su convencimiento de que la reconciliación personal con Cristo es la que base que cambia primero la Iglesia luego la sociedad. “En toda la historia humana sólo Jesucristo, el Hijo de Dios, es el que nos libera para vivir el amor como valor sagrado”, dice Welby.
Al recordar el episodio en el que Jesús camina sobre las aguas y llama a Pedro, el Arzobispo resaltó lo “absurdo” que suponía dejar la barca para saltar a las aguas. Sin embargo “lo que es absurdo por completo es totalmente razonable si es Jesús el que está llamando”. Aún ante el fracaso de Pedro, cuando comienza a hundirse, se demuestra que Jesús está por encima. “Su valor ha fallado, pero Jesús es más fuerte que el fracaso”, dijo Welby.
Aunque “el temor de los discípulos era razonable” porque “la gente no camina sobre el agua, “Jesús lo estaba haciendo”, explicó Welby. Por eso podemos “confiar y seguir a Cristo. Es razonable si él es lo que los discípulos terminar diciendo que Él es: Verdaderamente tú eres el Hijo de Dios”.
RECONOCER AL “HIJO DE DIOS”
Para el Arzobispo de Canterbury la presencia y obra de Cristo se ha hecho evidente en la historia de Reino Unido. “Durante más de mil años, este país ha reconocido en mayor o menor grado que Jesús es el Hijo de Dios, por el orden de su sociedad, por sus leyes, por su sentido de comunidad. A veces lo hemos hecho mejor, a veces peor. Cuando lo hacemos mejor, nuestro propio valor es liberado, para que Dios actúe entre nosotros y los seres humanos florezcan. Los esclavos fueron liberados, el servicio de salud público y la asistencia social fueron establecidos (...) Los desafíos actuales del medio ambiente y la economía, del desarrollo humano y la pobreza en el mundo, sólo puede ser enfrentados con una valentía extraordinaria”.
Welby recordó las palabras “humildes y sencillas” del Papa Francisco el pasado martes. “Nos llamó a ser protectores el uno del otro: de la naturaleza, de los pobres y de los vulnerables. El valor es puesto en libertad en una sociedad que está bajo la autoridad de Dios, para que construyamos plenamente la comunidad humana con la que todos soñamos. Oigamos a Cristo que nos llama y dice: “¡Ánimo, soy yo, no tengáis miedo!”.
POR UNA SOCIEDAD “ENRAIZADA” EN CRISTO
Insistió en la necesidad de que la sociedad establezca sus raíces en Cristo. “Si cortamos nuestras raíces en Cristo debemos abandonar la estabilidad que permite la toma de decisiones correctas. No puede haber justicia, o seguridad, o amor, o esperanza en nuestra sociedad si no es sobre esta base. Jesús nos llama, a través del viento y de las tormentas, a prestar atención a sus palabras para que tengamos el coraje de construir la sociedad”.
Para Welby los mejores logros de la sociedad se han producido cuando los cristianos han vivido sus vidas siguiendo el llamado de Jesús. Recordó la abolición de la esclavitud, la creación de la obra social y la sanidad pública, o la labor actual que realiza la Iglesia a favor de los necesitados.
Welby predicó además sobre la reconciliación, primero del ser humano con Dios. “Cuando nos reconciliamos con Dios somos capaces de reconciliar a los demás. Una vida centrada en Cristo hacer cambiar a la iglesia y una iglesia centrada en Cristo hace cambiar al mundo”, expresó.
SIN MIEDO AL FUTURO
El Arzobispo quiso concluir su reflexión animando a los creyentes, porque a pesar de las dificultades y las pruebas “la iglesia transforma a la sociedad cuando asume el riesgo de renovarse en la oración, en la reconciliación y en la declaración de confianza en la buena nueva de Jesucristo”.
“Jesucristo nos dice: soy yo, no tengáis miedo”, recordó Welby finalmente. “Estamos llamados a salir de la comodidad de nuestras propias tradiciones y entrar en las olas, buscando la mano de Cristo. Vamos a prestar atención a su llamado, para ser claros en nuestra predicación de Cristo, comprometidos con la oración a Cristo, y vamos a ver un mundo transformado”.
Fuentes: Reuters, Lambeth Palace
 
Editado por: Protestante Digital 2013

miércoles, 20 de marzo de 2013

Preguntas ante el nuevo Papa

Por. Juan José Tamayo, España*
La fumata blanca acaba de anunciar que los 115 príncipes de la Iglesia católica reunidos en cónclave han elegido en la tercera votación como nuevo papa al cardenal argentino Jorge Mario Bergoglio que ha tomado el emblemático nombre de Francisco, quizá en referencia a Francisco de Asís.
De los cónclaves que he conocido en mi mayoría de edad este ha sido el que ha contado con un seguimiento de mayor carga de ansiedad por católicos y no católicos y en un desmedido estado compulsivo por parte de los medios de comunicación, laicos o confesionales. Ansiedad y compulsividad que responden, sin duda, al deseo de liberarse de siete lustros de Iglesia instalada en el neoconservadurismo y el integrismo de los dos últimos pontificados, y a la necesidad de iniciar un periodo de transición, más aún, de reforma o de cambio radical o, al menos, como pedían algunos cardenales antes de entrar en el Cónclave.
Sería una temeridad hacer una valoración sobre el nuevo Papa, ya que carecemos de información suficiente. Pero sí es podemos plantear algunos interrogantes a los que esperamos vaya respondiendo en los próximos días al presentar su programa.
1. ¿Volveremos a disfrutar de la estación de la primavera en la Iglesia católica, como sucedió con el carismático Juan XXIII y con el Vaticano II, o seguiremos sufriendo los rigores de la larga invernada que se instaló en el Vaticano poco después del concilio?
2. ¿Contribuirá el nuevo Papa a devolver a los creyentes de las diferentes Iglesias cristianas y a los no creyentes de las distintas ideologías la esperanza en “otra Iglesia posible” o seguirá instalado en el anacrónico modelo católico romano y tendremos que abandonar, como a la puerta del infierno, toda esperanza?
3. ¿Seguirá apoyándose solo en los movimientos y teólogos neoconservadores, que le aplauden en las Jornadas Mundiales de la Familia y de la Juventud y glosan elogiosamente sus documentos, en las intrigas de la Curia y en el poder del Instituto de las Obras de la Iglesia, o escuchará a los teólogos de la liberación y del diálogo interreligioso, a los movimientos de mujeres, a las teólogas feministas?
4. ¿Tendrá como referente ético la opción por los excluidos y como prioridad la iglesia de los pobres, como fue la voluntad de Juan XXIII al convocar el Vaticano II, o se instalará en la moral católica interclasista y se apoyará en una jerarquía aliada con el poder del dinero?
5. ¿Seguirá el principio evangélico de que no se puede servir a dos Señores: a Dios y al Dinero o continuará pendiente de los movimientos de la bolsa para sacar rentabilidad de sus riquezas, que no reparte entre los pobres?
6. ¿Caminará por la senda del diálogo intercultural, interreligioso, interétnico, en busca de unos mínimos éticos y del bien común de la humanidad, o seguirá creyendo que “fuera de la Iglesia no hay salvación”?
6. ¿Echará un velo de silencio sobre la corrupción, los abusos sexuales, las operaciones económicas irregulares, la alianza con los poderes financieros, las luchas de poder, las deslealtades, impondrá el secreto sobre los informes que describen detalladamente las patologías del Vaticano, o los hará públicos en un ejercicio de transparencia, del que la Iglesia católica no ha sido precisamente ejemplo?
 
*Juan José Tamayo es director de la Cátedra de Teología y Ciencias de las Religiones, de la Universidad Carlos III de Madrid y autor de "Invitación a la Utopía. Estudio histórico para tiempos de crisis" (Trotta, 2012).
 
Fuente: Lupaprotestante, 2013.

sábado, 16 de marzo de 2013

HABEMUS PAPAM: ES ARGENTINO ¿EN QUE NOS BENEFICIARA UN PAPA LATINOAMERICANO?

Por. Luis Eduardo Cantero, Argentina*
El miércoles 13 de marzo me levanté con la expectativa de saber quién sería el nuevo Pontífice. Me preguntaba ¿será un africano, asiático, norteamericano, español o latinoamericano? Pensé en este último porque los medios anunciaban por doquier a los brasileños. Nada decían de los dos argentinos, ecuatoriano y mexicano. Dije seguro será un brasileño, ¡qué bueno sería! ¿En que nos beneficiará un Papa latinoamericano?
Mientras seguíamos las noticias por los diferentes medios, todo era tranquilo en nuestra Argentina. La Plaza de Mayo como siempre convulsionada por turistas, gentes laburantes y orantes. Pero, eso sí pendiente de quien sería el nuevo Papa.  Nadie se esperaba, ni los mismos argentinos (as) creían que tal vez, aquel cardenal sencillo que atravesaba la Plaza de mayo para comprar el diario, tomar un café o conversar con cualquiera que se le  cruzaba en su camino. 
Yo varias veces me  lo encontré en el subte de la línea A, pues era  mi rutina  caminar hacia la Plaza de mayo.  Varias veces lo vi atravesar esa Plaza con su diario. Nunca pensé que ese hombre tan sencillo, de perfil bajo y que está implicado en la desaparición de dos sacerdotes en la época de la dictadura; pudiera ser el nuevo pontífice, cuando escuchaba el anuncio de: « Habemus Papam: Eminentissimum ac reverendissimum Dominum Georgius Marius, Dominum Sanctæ Romanæ Ecclesiæ Cardinalem Bergoglio, Qui sibi nomen imposuit Franciscus»
Me quedé sorprendido, ¿no puede ser?, ¡un Papa argentino:Bergoglio!, ahora Francisco.  Nadie en ese momento se preguntó por el nombre, ni se sabe del motivo de su elección. Solo hubo felicidad del pueblo argentino y latinoamericano. Pues, por primera vez tenemos un Papa americano, sobre todo  latinoamericano, nacido en el lugar más lindo de nuestra América latina: Argentina.  Una nación hermosa, bendita, que en su seno han surgido grandes personajes: como Gardel, Borges, Diego Armando Maradona, Messi, Reina y nos faltaba un pontífice…
Aunque nadie se haya preguntado por la elección del nombre, yo si lo pensé, a que Francisco se refiere, pues dentro de la lista de santos de la iglesia católica romana hay otros Franciscos, como San Francisco de Borja,  Francisco de Asís,  el de los pobres, de una vida sencilla, austera. O a Francisco Javier, el santo español, patrono de los misioneros; quien fue compañero de San Ignacio de Loyola, fundador de la Compañía de Jesús. Su ministerio pujante fue la evangelización en la India y Japón. Creo que nuestro Pontífice nos debe dar razones del nombre que ha elegido, pues dependiendo de la elección sabemos cuál será su misión de su pontificado.
Mientras aguardamos por su  explicación. Me pregunto ¿Qué podemos esperar de un Pontífice latinoamericano? ¿Restaura  la iglesia católica romana? ¿Cuál será el rol de la mujer en la iglesia? ¿Qué lugar ocupará el ecumenismo y el dialogo con otras religiones no cristiana? ¿Intercederá por el problema de las Malvinas? ¿Permitirá a los homosexuales al santo ministerio? Pues, antes de ser nombrado Papa, dejó ver su postura con respecto a las leyes del matrimonio igualitario y la de identidad de género y alertó: “No seamos ingenuos: no se trata de una simple lucha política; es la pretensión destructiva al plan de Dios”.
Según lo anterior,  nos deja claro que nuestro Pontífice latinoamericano se alineará a  las líneas más conservadoras de los que lo han nombrado; cumplirá el sueño de seglares y laicados que piden por una iglesia abierta e inclusiva o seguirá los ideales de su  santo de devoción… El tiempo nos dirá que opción tomó y veremos en que nos ha beneficiado haber tenido un pontífice latinoamericano.
*Luis Eduardo Cantero, pastor, Teólogo, Filósofo y Docente universitario. Doctorando en Historia de América Latina por la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla, España.

jueves, 14 de marzo de 2013

HE VISTO A JESUS MUTILADO Y TORTURADO EN EL CUERPO DE UNA MUJER MEXICANA

Por. Luis Eduardo Cantero, Argentina*

Me sorprendió la muerte de María Santos G, una heroína mexicana de nuestro siglo XXI, que se enfrentó a los carteles de la droga desde su función de alcaldesa. Fue un símbolo de lucha y justicia, que puso a temblar a los carteles mexicanos. Ella es un ejemplo de vida, de compromiso y de seguimiento al crucificado. Duele que haya muerto en manos de cobardes, “ahora es un número más en las escalofriantes estadísticas de la guerra contra los carteles mexicanos que se cobran cada año miles de vidas.” 
María Santos G, sabía a lo que se enfrentaba, no tuvo miedo de levantar la bandera contra la lucha de los mercaderes de la droga, y así lo expresó en una entrevista: A pesar de mi seguridad y la de mi familia, lo que ocupa mi mente es mi responsabilidad hacia mi gente: los jóvenes, las mujeres, los mayores y los hombres que se parten el alma cada día sin descanso para encontrar un pedazo de pan para sus hijos".
Esas palabras de responsabilidad y compromiso con su gente representan la forma en que Jesús nos invita a todos (as) a rebelarnos contra toda estructura o sistema económico o religioso que abuse y destruya a nuestra gente. Jesús se enfrentó a los poderes de su tiempo, porque veía que su pueblo estaba sufriendo en manos de un sistema opresivo y excluyente, que excluía a los leprosos, a las personas con cualquier defecto físico, a los extranjeros, etc.  Por eso, Jesús vino al mundo, vivió y sufrió entre nosotros y fue el primero en experimentar las torturas que en Semana Santa recordamos con dolor.
Ese mismo dolor del alma que acompañó a María Santo hasta el último aliento, al sentir los golpes y las torturas  más viles que haya vivido un ser humano. Su dolor es nuestro dolor, un dolor que clama justicia, que clama no solo al pueblo mexicano para que haga un pare contra los mercaderes de la droga, sino a todo el pueblo latinoamericano que sufre este mal de ver a niños, niñas, jóvenes, mujeres, ancianos que mueren por el consumo de  la droga…
María Santos G, sintió dolor por el sufrimiento de su gente, lo cual la impulsó a pelear desde el escenario político; pues estaba cansada de ver a sus homólogos sin hacer nada. ¿Cuantos políticos latinoamericanos se podrían preguntar qué están haciendo con el legado de esta mujer que sobrevivió a dos atentados? Sin embargo, los dolores de las balas no le impidieron continuar y siguió peleando. A ella lo que le importaba era luchar por su gente, tratar de erradicar a los mercaderes de la droga. Se trataba de una lucha contra el mal, pero sabía que asumir esa responsabilidad y ese compromiso era más gratificante que rendirse a los deseos  materialistas de los mercaderes…
¿Cuántos políticos podrían seguir el modelo de María Santos G? ¿Cuántos pastores y pastoras evangélicos podríamos asumir esa responsabilidad? ¿Cuántos políticos evangélicos e iglesias, de hecho, han asumido dicha responsabilidad y compromiso o más bien han sucumbido al miedo a ser torturados, mutilados, etc.? ¿No será esto el reflejo de que aún no se han negado a sí mismos, a los placeres, a la riqueza, a los deleites de este mundo, debido a que sus acciones y predicas los dejan mal parados; porque sólo se han preocupado de atesorar riquezas a través de la explotación del diezmo, los pactos, las siembras, etc., que dejan a los hermanos cada vez más pobres?
Somos responsables de lo que muchos de estos mercaderes religiosos están  haciendo, igual que lo son los dueños de las drogas que envenenan y matan a sus seguidores para quedarse con su dinero. Cada uno de nosotros (pastores, pastoras,  líderes) somos responsables de lo que Dios nos ha llamado a cumplir, a saber, las demandas del Reino de Dios.
A veces cometemos el error de pensar que ser pastor, pastora, profeta o seguidor de Cristo consiste en considerar Su Palabra como un libro mágico y que podemos solucionar los problemas de la gente apelando a esa supuesta magia, sin pasarlos por la lupa de un análisis crítico de nuestra realidad. Sólo queremos vivir la fe obedeciendo a Dios en una especie de huida de nuestra propia realidad. Sin duda, obedecer y pasar tiempo a solas con Dios es importante, pero sin ningún compromiso no hemos comprendido la relación de Jesús con su Padre, la cual estaba basada en el amor al prójimo.
Así lo entendió María Santos G, que obedeció a las palabras que encontramos en la primera carta de Juan: “El que dice que permanece en Jesús, debe andar como él anduvo.” (1 Juan 2: 6). Estas palabras me han permitido ver a Jesús mutilado y torturado en el cuerpo de una mujer mexicana, y mi oración es: “Señor, que tu Espíritu Santo nos guíe hoy. Ayúdanos a discernir las prioridades y a vivir como el Jesús reflejado en María Santos…”
 
*Luis Eduardo Cantero, pastor, Teólogo, filósofo y Docente universitario. Doctorando en Historia de América Latina por la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla, España.

lunes, 11 de marzo de 2013

Aunque la mona se vista de seda ... mona se queda: Títulos teológicos y ministeriales sin teología

Por. Osias Segura, EE.UU
En los últimos 10 años América Latina ha sido invadida por instituciones teológicas hispanas ubicadas en los Estados Unidos que son de muy dudosa calidad académica. De pronto vemos un creciente interés por parte de pastores y pastores para obtener una acreditación. Algunos que hace unas décadas ridiculizaban el estudio teológico, hoy sienten la necesidad de estudiar para obtener un título. Unas ofrecen títulos baratos y rápidos por internet, y otras sin un campus ofrecen sus cursos en iglesias locales alrededor de América Latina. Veamos lo que al menos a llegado a Costa Rica. Si sabe de otras organizaciones en su país, ¡Comparta su experiencia con nosotros!"Latin University of Theology" ofrece “títulos universitarios” a distancia y en campus, según ellos “en una manera acelerada no tradicional”, por ejemplo los estudiantes deben pasar “144 horas en clases más trabajo en casa y exámenes” aunque no especifican cual grado académico se obtiene por este leve esfuerzo. Esta institución llegó años atrás al país ofreciendo títulos doctorales honorarios a cambio de cierta suma de dinero. Algunos pastores evangélicos que con costos terminaron su secundaria, pagaban el papeleo, y hoy exigen que entre sus muchos prefijos se les llame “doctores.
Otra institución es "Miami International Seminary" que ofrece sus cómodos títulos por internet, y también dispone de muchas sedes alrededor del mundo. En mi contacto con ellos, al preguntarles si su institución tiene acreditación universitaria, su respuesta fue negativa. Es decir, una maestría o cualquier otro grado académico del "MINTS" no es reconocido en ninguna universidad pública como la Universidad de la Florida, ni en ningún país del mundo.
También tenemos la Asociación Internacional Hispanoamericana de Capellanes (AIHCA) con su sede principal en Alabama, EE.UU. Y con representación en 27 países. En tan sólo 4 meses intensivos por internet el estudiante se gradúa, con el costo de $300 USD, y una membresía extra de aproximadamente $7 USD mensuales. Y según parece cualquiera puede estudiar, sin importar el haber terminado la secundaria.
Finalmente, tenemos la "Universidad Nuestro Pacto Internacional". UNPI llegó a Costa Rica hace unos pocos meses reconociendo los “años de experiencia” de los pastores, y ofrecen unos cursos de nivelación. Así, un pastor con estudios secundarios puede optar por una licenciatura a cambio dinero, y de un examen de algunas pocas horas sobre “doctrina bíblica”. Personalmente contacté la oficina de lo que sería el "CONESUP” en el estado de la Florida, para averiguar sobre la acreditación universitaria de estas dos últimas instituciones. En el caso de UNPI, en el Estado de la Florida, está reconocida por la Comisión de Educación Independiente (por eso dicen que está “acreditada”) por tanto no está sujeta a supervisión gubernamental.
En simples palabras, ninguna de estas instituciones tiene acreditación universitaria, aunque tenga acreditación educativa. Es decir, si alguien obtiene una licenciatura, o maestría, o doctorado en estas instituciones, (1) Nunca podrá enseñar en una institución teológico-universitaria reconocida o en vías de ser reconocida como en el caso de Costa Rica el CONESUP (Consejo Nacional de Educación Superior, oficina estatal en Costa Rica que regula universidades), (2) y nunca un “titulo” de alguna de esas organizaciones será reconocido o convalidado a nivel universitario en Costa Rica, o en ningún país latinoamericano a un nivel universitario. Estas instituciones ofrecen títulos universitarios sin ser universidades. En pocas palabras, todas estas instituciones engañan a muchos pues "dicen estar acreditadas" por ser asociaciones educativas, pero no están acreditadas a nivel universitario. Así que hay líderes religiosos evangélicos licenciados, "masters", y hasta doctores a quienes les regalaron los títulos, y otros con poco estudio y sin nunca saber lo que es escribir una tesis, o un trabajo de investigación, hoy disponen de un título pero de “mentirillas”. ¿Afecta esto a la iglesia en América Latina?
Esta mediocridad académica nos demuestra la situación en la que la iglesia evangélica se encuentra. Es difícil entender que para la medicina, odontología, psicología, leyes, finanzas, etc. requerimos profesionales graduados. Pero en algunas iglesias evangélicas “cualquiera” con carisma, aunque sin formación profesional se convierten en líderes de congregaciones. ¿Cuál es el problema? A estos líderes les visitan personas con profundas necesidades emocionales y espirituales, gente que espera semanalmente palabras de orientación y formación espiritual. En cambio, algunos lo que reciben son promesas de prosperidad y terminan siendo estafados con una mala formación profesional. Qué lástima que a nivel comunal, estos líderes religiosos no deseen capacitarse a un nivel universitario formal. En vez de querer servir a otros pareciera que desean servirse a sí mismos comprando sus “títulos” mediocres, en vez de seriamente esforzarse como muchos latinoamericanos lo hacen todos los días.

Sobre el autor:
El Dr. Osías Segura es un misionólogo costarricense. Osías, después de cinco años de enseñanza en el Seminario ESEPA en Costa Rica, se trasladó a California; hoy está radicado en en Pasadena donde es profesor asociado, en inglés y español, del Seminario Teológico Fuller
 
Fuente: El blog de Bernabé, 2012

viernes, 8 de marzo de 2013

La base de la misión cristiana

Por C. René Padilla, Argentina

Por varios siglos la expansión del cristianismo estuvo vinculada a la expansión colonial de las naciones “occidentales y cristianas”. Esta era, por así decirlo, la dimensión religiosa de la colonización: los pueblos conquistados por los europeos eran obligados a abrazar la cultura de los conquistadores, la que incluía la fe cristiana. Así, podemos decir que la base de la fe cristiana era el poder colonial ejercido por España y Portugal (en el caso del catolicismo romano) o por Inglaterra, Holanda, Alemania y Suecia (en el caso del protestantismo).
En un periodo más reciente, durante la Guerra Fría, un movimiento estadounidense que tenía como misión la evangelización de estudiantes universitarios en varios países del mundo promovía la promoción de recursos económicos con el siguiente aviso: “ayúdenos a detener el avance del comunismo, envíenos su contribución financiera”. Sería posible decir que, para los líderes de ese movimiento, la misión tenía como base la ideología capitalista en contraposición con la ideología comunista.
Se podrían dar otros ejemplos de cómo los cristianos, en lo que respecta a nuestra misión, hemos sido condicionados a lo largo de la historia por la situación que nos rodea. Nos olvidamos que la base de la misión cristiana no es otra que la revelación de Dios que culmina en Jesucristo, de la cual dan testimonio las Sagradas Escrituras, y tratamos de justificar nuestra misión con razones derivadas de nuestra propia cultura.
Hay varios textos de la Biblia que podríamos citar para mostrar el lugar central que la revelación de Dios en Jesucristo ocupa en la misión cristiana. Probablemente ningún de ellos ha sido tan usado en lo que se refiere a la Gran Comisión en Mateo 28:16-20, un pasaje que sintetiza el contenido del Evangelio. Ya en 1590, Adrián Saravia (1531-1613), un joven teólogo reformado holandés contemporáneo de Calvino, escribió un tratado sobre la vigencia de ese texto del Nuevo Testamento. Su propósito era demostrar la necesidad de que la iglesia en Europa rompiera con la reclusión impuesta por la cristiandad y, en obediencia a la comisión de Mateo 28:19, se apropiara de la promesa de Mateo 28:20. Posteriormente, William Carey (1761-1834), el zapatero misionero, publicó su famoso tratado sobre el mismo tema, por un desconocimiento general del tratado de Saravia, pasó a la historia como el primer protestante en recurrir a la Gran Comisión para promover la misión transcultural.
Hay muchos textos bíblicos que apuntan al propósito de Dios de que su mensaje de redención llegue a todas las naciones de la tierra. Por ahora, en vista del lugar que Mateo 28:16-20 ocupa en el primer Evangelio y en movimiento misionero moderno, vamos a explorar su contenido en varios artículos.
La escena descrita en el texto tiene lugar en Galilea, la provincia donde Jesús creció y desarrolló la mayor parte de su ministerio; la región “semipagana” donde convocó a la mayoría de sus seguidores y de donde provenían casi todos sus discípulos. Es el último encuentro del Cristo resucitado, antes de su ascensión, un encuentro que marca el fin del ministerio terrenal de Jesucristo y el acto de comisionar a sus discípulos como continuadores de ese ministerio. Las palabras que Jesús les dirige son en realidad el testamento en el cual deposita su legado no sólo para ellos sino también para los discípulos que les sucederán “hasta el fin del mundo”. Son, consecuentemente, palabras cuyo sentido tiene mucho que ver con todos los que se reconocen como discípulos de Cristo hoy.
 
Fuente: El blog de René Padilla, 2013.

miércoles, 6 de marzo de 2013

Economía del bien común

Entrevista a CHRISTIAN FELBER "Castellano." Un economista alternativo que presenta la teoría de "La economía del bien común". Unos postulados perfectamente aplicables que darían la vuelta al modelo económico actual.

sábado, 2 de marzo de 2013

¿CREES QUE HAY UN MUNDO CAIDO Y CELESTIAL?

Por.  Luis Eduardo Cantero, Argentina*

El mundo en que vivimos es un espacio para recrear nuestros deseos, nuestros sueños, anhelos, propósitos… Es un espacio para vivir y disfrutar sin tapujos, sin negarnos a vivir esos deseos, esos sueños,…  Además, es un espacio para el aprendizaje del ser,  consigo mismo, con los otros y con el ser  divino.  Pero, en esa convivencia surge una infinidad de dificultades que hacen que esta experiencia de vida en el mundo se vuelva problemático.
Frente a ese mundo problemático el ser humano no sabe qué hacer, no comprende porque los infortunios de la vida, como la maldad le arrebata a sus congéneres esos deseos, anhelos, etc. Han tratado de justificar esta economía del mundo material e inmaterial con argumentos lógicos e ilógicos sobre el bien y el mal. Para algunos teólogos fundamentalistas, el infortunio es parte del pecado humano, la única solución  para ellos es entregar su vida a Cristo, y todo cambiara incluyendo la sociedad.
En cambio, para otros pensadores (me incluyo), los infortunios y males de este mundo son parte del mundo caído. Pues, los infortunios, la maldad son herramientas que Dios usa para equilibrar el mundo de los seres caídos, como la afirmaba Hegel: “La maldad del ser humano seria empleada por Dios para realizar su plan histórico. Los deseos desenfrenados, la codicia, los atropellos,  las mezquindades, son herramientas que permite al ser avanzar hacia la libertad absoluta…”
Esa libertad que no surge del refugio a una religión o ideología, es una libertad que es comprendida desde el seguimiento a Cristo, que cuando lo golpeaban, lo torturaban solo decía “perdónales porque no saben lo que hacen”. Cristo como un ser humano había alcanzado la libertad desde su caminar con Su Padre, sabía que este mundo es un mundo para los otros, un mundo donde aprendemos a vivir y dar nuestra vida por los otros.
Un mundo por mas que se inunde de mensajes religiosos, y se conviertan por el mensaje salvífico, es un mundo construido por seres humanos, seres que están impregnados de la mancha de sus deseos, anhelos, propósitos, buenos que al sentirse amenazado por el otro, tiende a generar conflictos, como sucede hoy en día en muchos grupos evangélicos, que han creado fisura en el corazón de su doctrina, que los ha llevado a crear binomios:  Tradicional vs renovados, neopentecostales, puros vs impuros, iglesias vs el  mundo malo.
Esos binomios siempre han existido en este mundo, grupos que nacieron con sus deseos, propósitos, según ellos sanos,  para cuidar esos deseos, etc. Los ha llevado a alejarse de la realidad del mundo en que comparten con los otros.  Si un ser humano desea ser parte de ellos, debe aceptar  sus deseos, de lo contrario se convierte en un enemigo. Otros grupos se han hecho parte del mundo para vivir al ritmo de los tiempos, haciendo de los deseos de los otros, sus deseos, sin discusión alguna. Porque  ha comprendido que el mundo en que vivimos es un mundo que necesita ser comprendido desde el plan divino, un espacio que nos ayuda a empezar a vivir los deberes y derechos que urden sus raíces en la Palabra de Dios…
Es increíble como existe siempre esta dualidad, mientras algunos evangélicos están haciendo posible el mundo caído un lugar mejor, lindo y hermoso. Otros pintan escenarios catastróficos, llenándolos de fabulas y relatos ilusorios, e impidiendo que sus congéneres gocen, disfruten sus deseos, sus anhelos, y sueños.  Mi pregunta es por qué la diferencia, si todos y todas bebemos a diario de la fuente de toda fuente: La Palabra de Dios ¿Cuál es la diferencia? Es difícil encontrar la diferencia, porque depende  de la forma de cómo ves las cosas, lee o interpreta la Palabra de Dios.
Cada uno es interprete de sus propios signos, cada uno decide lo que quiere ser y Dios te ayudará a llegar al destino que vos deseas llegar.  No existe guía puro, no existe un plan divino ideado, pensado y argumentado por los teólogos fundamentalistas, ellos han interpretado su mundo; su interpretación esta mediada por su propio contexto. Eso marca la diferencia.
Concluyo que cada uno deberá ir construyendo su propio destino, plan hacia el mundo inmaterial o mundo material, pero mientras algunos se desgastan pensando y creyendo en estas interpretaciones, yo seguiré disfrutando este mundo caído, que muchos han satanizado. Disfruto en mis deseos, sueños hasta lograr llegar al destino potenciado que yo mismo me he proyectado. Solo sé que eso es lo que único que uno se lleva cuando nos llegue el tiempo de la partida a la eternidad. Disfruta y goza mi hermano que eso es lo único que te llevará… ¡Piénsalo!
*Luis Eduardo Cantero, pastor, Teólogo, filósofo y Docente universitario. Doctorando en Historia de América Latina por la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla, España.