Mi experiencia de pastor en el evangelismo,

Desde que era estudiante de teología en el Seminario Teológico Bautista Internacional, se ha discutido sobre el pastorado y la evangelización. Algunos se deslizan por las ramas para no tomar en serio su trabajo, aunque vean que la iglesia cada vez merma más en la asistencia; en algunos casos siempre son los mismos. No se preocupan, no hay pasión por las almas, no juegan ni dejan jugar, si otro colega quiere ayudar, lo cierran no dándole oportunidad por la sencilla razón del prejuicio o del miedo a perder su "trabajo". Pero, que pensaría el apóstol Pablo, Apolos, Pedro u otros. Ellos laburaban no se conformaban ni trataban de cuidar su puesto, sencillamente hacían el trabajo y lograban que otros participaran del ministerio. Porque ellos, confiaban en Dios y si él le agregaba otro a su equipo, le asignaban una tarea dentro de la estructura del Reino de Dios, que era extenderlo hasta lo último. Es por ello que les quiero compartir esta serie de mensaje del pastor Salvador Dellutri, que no teniendo un grado de Licenciado eclesiástico en Teología de un Seminario, solo un Diplomado en teología, periodista y egresado en Filosofía y Letras. (Me he dado cuenta que los que hemos egresados de una universidad, somos más abierto al trabajo en equipo que los no egresados...) que tiene el mejor grado académico y espiritual que ser guiado y apasionado por extender el Reino de Dios, a eso se debe su éxito en el ministerio y nos camparte desde su experiencia. Esperamos que usted e igual que yo seamos motivados a tener pasión por las almas, hacer del pastorado una experiencia real y no mecánica, sienta la pasión por extender el Reino de Dios. Les invito a leer el segundo artículo de Salvador Dellutri, titulado "Mi experiencia de pastor en el evangelismo". Nos relata cómo desarrolló su doble tarea como pastor y evangelista. "Cuando el Pastor, movido por el Espíritu Santo y el amor por las almas, diversifica la tarea evangelística y la encabeza, el pueblo de Dios se siente motivado, se moviliza y acompaña el esfuerzo con toda naturalidad", Afirma.

"La evangelización debe ser un fuego que enciende el corazón y la vida de cada creyente". Salvador Dellutri
Fuente: Logoi, 2009.