El sociólogo argentino Hilario Wynarczyk
analiza en esta entrevista de Pulso Cristiano los tres primeros años del
papado de Francisco, que se cumplieron el 13 de marzo de 2016.
–¿Qué
evaluación hace de los tres primeros años del papado de Francisco? ¿Defraudó,
cumplió o superó sus expectativas?
–Respecto del papado de Francisco Primero mis
expectativas eran mayormente sociológicas. Y tiendo sobre todo a enfocarlo a
Francisco como un líder de una lucha en tres frentes.
En el frente interno, él asumió el desafío de
limpiar las finanzas y los problemas relacionados con la pedofilia que corroen
el Vaticano y la imagen de la Iglesia.
Las informaciones de público conocimiento indican
que Benedicto XVI habría hecho un balance del problema y llegado al punto de
sentirse fuera de las condiciones necesarias para enfrentarlo, debido en parte
quizás a su edad.
La actual gestión del Vaticano ha hablado de hacer
algo al respecto pero todavía en los últimos tiempos salieron a luz acciones de
malversación de fondos.
Por otra parte los dirigentes del clero no han
comunicado los nombres de los sacerdotes pedófilos en diversos países ni los
han entregado a la justicia.
En la sociedad civil quienes delinquen en esa forma
encuentran sus nombres expuestos al público y enfrentan causas judiciales.
Por otra parte, Francisco Primero ha hecho un
esfuerzo para que divorciados vueltos a casar no se alejen, y alejen a sus
hijos, del seno de la Iglesia Católica.
En el frente externo considero yo que hay un
esfuerzo de Francisco Primero para formar una especie de coalición
inter-religiosa y de naciones que fortalezca a Occidente frente al avance del
fundamentalismo musulmán, pese a lo cual, este fundamentalismo continúa
cometiendo ataques impresionantes y países occidentales (incluyendo Rusia)
siguen bombardeando, multitudes sufren padecimientos atroces.
También en el frente externo y como una dimensión de
la posibilidad de crear una coalición, el discurso de Francisco se dirige muy
enfáticamente al problema de la pobreza y la degradación de la naturaleza, que
conducen siempre a conflictos sociales y estos jaquean los cimientos de las
naciones.
Hace poco, en febrero la visita de Francisco a
México despertó expectativas y preguntas.
En primer término me llamó la atención el recurso a
una nomenclatura religiosa pre moderna, diría que de la era colonial, al
referirse a la Virgen María como Reina y Emperatriz de América.
Por otra parte, Francisco llegó a México, el Estado
movilizó 13.000 personas de la policía y las fuerzas armadas para brindar
seguridad a su presencia y los encuentros que suscitaría.
Francisco fue conducido a una base militar desde
donde un helicóptero lo llevó al sitio donde debió dar una misa con público
multitudinario, compuesto en su mayoría seguramente por gente de los escalones
inferiores de la economía.
A este público, y posteriormente a uno similar en la
frontera de México con los Estados Unidos, Francisco le habló demostrando pena
(misericordia sería la palabra técnica) hacia los pobres y excluidos.
Francisco enfatizó como siempre lo viene haciendo,
la demonización de las riquezas, el mercado, el deseo egoísta de riquezas y el
maltrato a la naturaleza.
El Papa les hablaba a las multitudes los pobres de
las multitudes no podrían ser en realidad alcanzados por esta parte del
mensaje, pues no tienen acceso a las riquezas ni pueden maltratar demasiado a
la naturaleza.
En última instancia les hablaba a los ricos y
poderosos para que fuesen personas más buenas. No sé aquí qué eficacia
sociopolítica real podría tener este discurso.
Excepto una que para mí es muy clara: Francisco
funciona como un héroe social galvanizador de un discurso que se difunde a todo
el orbe y sintetiza la preocupación por la igualdad social y el respeto a la
Madre Tierra.
Esta síntesis y difusión sustentada en un enorme
capital simbólico es en sí mismo una gran tarea, porque se trata de un discurso
relacionado con preservar la Humanidad y con líneas básicas de los Evangelios.
En otro plano, que nos acerca a las preocupaciones
teológicas, me atrevo a decir parafraseando la retórica y las argumentaciones
de Michel Foucalt en un breve libro titulado La prosa de Acteón, que la
experiencia de México nos coloca delante de la inmensa genealogía que va desde
el Omnipotente del Libro del Génesis al crucificado de los Evangelios y desde
éste al vicario que es un pontífice espiritual y al mismo tiempo un César.
En esta secuencia se difracta la difícil comprensión
del significado y la naturaleza de la Iglesia, un tema marcado por
contradicciones presentes en la reflexión a partir del libro del Apocalipsis,
retomadas por San Agustín y por el mismo Benedicto XVI, y por intelectuales
como Giorgio Agamben.
Pero en definitiva y en síntesis, a mí me gustaría
que Francisco hablase también de las clases medias y los trabajadores que con
sus impuestos y generación de riqueza sostienen el Estado que a su vez se hace
cargo con ese dinero, de la educación, la salud, la seguridad, las obras de
infraestructura y los subsidios a los desvalidos del sistema social, que son
una gran multitud y se encuentran también desvalidos frente a las posibilidades
de ser utilizados como masa de maniobra para acciones políticas, problema que
necesita gestiones de reincorporación al mundo del trabajo y revalorización de
la cultura del trabajo, insistentemente tratado en público por la Conferencia
Episcopal Argentina (CEA).
No obstante eso, con admiración rescato de todo el
trabajo de Francisco la asunción del rol de un hombre valiente que enfrenta los
problemas de la Iglesia que le toca dirigir y asume un papel de galvanizador de
un discurso hacia todas las latitudes del Orbe, haciendo que en diversas
maneras la reflexión cunda en la sociedad.
–Luego
de la llegada de Jorge Bergoglio al papado, ¿observó cambios en la relación de
la Iglesia Católica Romana con las iglesias evangélicas de su país, de América
latina y del mundo? ¿Cuáles fueron esos cambios? ¿Fueron positivos o negativos?
–Creo que hubo cambios con pocas consecuencias.
Francisco ya antes de ser Papa, siendo arzobispo en la ciudad de Buenos Aires,
apoyó encuentros del catolicismo carismático con los evangélicos creando mucha
simpatía entre estos, hasta el punto de que algunos de sus dirigentes de los
sectores teológicos más conservadores llegaron a hablar de Francisco como un
Siervo de Dios, sobre todo luego que advino Primado de la Iglesia Católica.
Posteriormente ha habido viajes inter religiosos al
Oriente Próximo y otras actividades, donde siempre han ocupado los espacios,
solamente o principalmente, representantes del catolicismo, el judaísmo y la
religión musulmana.
Creo que esto ha sido mayormente un intento de
contribuir a una especie de alianza de monoteísmos, asociados a su vez Estados,
para fortalecer una coalición capaz de crear un cerco alrededor del fanatismo
musulmán radical, que apoyándose en recursos violentos tiende a imponer sus
reglas a los otros musulmanes, a sostener negocios para estructurar un Estado o
varios Estados con forma de califatos. y recuperar el dominio que en períodos
muy lejanos tuvo sobre España.
En todos estos viajes y estas reuniones, los
evangélicos no han participado, o aparecieron mayormente en artículos
periodísticos algunos pastores de corrientes protestantes de altísima
significación histórica e intelectual, pero demográficamente muy minoritarias.
–¿Qué
desafíos planteó y aún plantea el papado de Francisco a las iglesias evangélicas
de su país, de América latina y del mundo, y en sus pastores y dirigentes?
–Creo que el principal desafío a las iglesias
evangélicas en la Argentina es la de ser capaces sus dirigentes, de asumir
conductas públicas como las de la Conferencia Episcopal Argentina, CEA.
La CEA periódicamente emite documentos con críticas
que podríamos llamar críticas proféticas, a favor de la democracia, el sistema
republicano, el respeto a las leyes, la lucha contra la pobreza y el
narcotráfico, las formas de la corrupción enquistadas en la esfera pública y el
problema de los subsidios a los multitudinarios caídos del sistema social que
no resultan orientados a incorporarse a la cultura del trabajo y tal vez
podrían llegar a servir como masa de maniobra de convocatorias políticas.
Los líderes de las iglesias evangélicas, pero en
este momento pienso en las demográficamente más numerosas, no hablan de estas
cosas o cuando hablan de algunas de ellas lo hacen apelando con un tono que
suena ingenuo a recitaciones de versículos bíblicos, mientras es necesario
hablar de sociedad, economía y política, en términos de sociedad economía y
política, accesibles a todas las personas por encima de su confesiones
religiosas.
En fin, se trata de hablar un lenguaje secularizado,
dirigido hacia la sociedad secular, debajo del cual pueden resonar como ecos
los valores de la fe religiosa.
El colectivo de los evangélicos enfrenta otro
desafío y es que, particularmente en la Argentina, las iglesias del
protestantismo histórico-liberacionista, tecnicismo con el que me refiero a las
iglesias protestantes que décadas atrás adhirieron al Movimiento Ecuménico,
cuentan con altos niveles de calificación intelectual entre sus pastores y
profesores de teología, pero al día de hoy institucionalmente atraviesan una
crisis que en algunos espacios, como la enseñanza teológica, es crucial.
Cambiar este panorama resulta trabajoso porque en
las iglesias evangélicas más numerosas, el público que las compone posee
menores calificaciones socioeconómicas y culturales, las formaciones teológicas
de los pastores manifiestan, creo yo, tensiones muy serias con las ciencias
sociales, a la vez que una rígida adhesión al literalismo bíblico también
conocido técnicamente como “inerrancia bíblica”.
Pero al mismo tiempo, es posible advertir
interesantísimas participaciones de dirigentes evangélicos a niveles
municipales y provinciales en el interior de la Argentina.
Hilario
Wynarczyk es Dr. en Sociología, Máster en Ciencia Política con Orientación en
Teoría y Método, Licenciado en Sociología. Brindamos una lista de sus artículos
y libros relacionados con las respuestas a Pulso Cristiano.
“Encuentros inter-religiosos en el Luna Park. Datos
y reflexiones (Parte 1)”. En: Lupa Protestante – Revista cristiana de teología,
cultura y opinión. Barcelona (Cataluña, España): Ateneo Teológico, 11 octubre
2013. http://www.lupaprotestante.com/lp/blog/encuentros-inter-religiosos-en-el-luna-park-datos-y-reflexiones-parte-1/
“Encuentros inter-religiosos en el Luna Park. Datos
y reflexiones (Parte 2)”. En: Lupa Protestante – Revista cristiana de teología,
cultura y opinión. Barcelona (Cataluña, España): Ateneo Teológico, 16 octubre
2013.
http://www.lupaprotestante.com/lp/blog/encuentros-inter-religiosos-en-el-luna-park-datos-y-reflexiones-parte-2/
http://www.lupaprotestante.com/lp/blog/encuentros-inter-religiosos-en-el-luna-park-datos-y-reflexiones-parte-2/
“¿Una gláznot de la Iglesia Católica? ¿Cómo
funciona? ¿Hasta dónde llegará?”. En: Lupa Protestante, Barcelona, Ateneo
Teológico, 4 abril 2014: http://www.lupaprotestante.com/lp/blog/una-glaznot-de-la-iglesia-catolica-como-funciona-hasta-donde-llegara/
“Tiempo de señales a un año de papado de Bergoglio.
Hasta donde irá todo”. En: Cordialmente, Publicación del Movimiento Pastores
por la Gente. 21 abril, 2014
http://www.cordialmentepxg.com/2014/04/21/tiempo-de-senales-a-un-ano-de-papado-de-bergoglio-3-hasta-donde-ira-todo/
http://www.cordialmentepxg.com/2014/04/21/tiempo-de-senales-a-un-ano-de-papado-de-bergoglio-3-hasta-donde-ira-todo/
En pos del ‘efecto Francisco’: un relato con
números”. Buenos Aires: Red de Estudios de la Diversidad Religiosa. 2015 (mayo
11).— En: Cordialmente, Publicación del Movimiento Pastores por la Gente (26
mayo 2015). http://www.cordialmentepxg.com/2015/05/26/en-pos-del-efecto-francisco-un-relato-con-numeros/
“La iglesia católica en la encrucijada: dos
metáforas soviéticas”. En: Renold Juan Mauricio &
Frigerio Alejandro (compiladores). Visiones del Papa Francisco desde las
ciencias sociales. Rosario, Argentina: Universidad Nacional de Rosario Editora.
Pp. 67-76. 2014 (salido de imprenta 2015).
Ciudadanos de dos mundos. El movimiento evangélico
en la vida pública argentina. 1980-2001. Buenos Aires: UNSAM Edita, Sello
Editorial de la Universidad Nacional de San Martín. 2009. (392 páginas).
Sal y luz a las naciones. Evangélicos y política en
la Argentina (1980-2001). Buenos Aires: Instituto Di Tella y Siglo XXI Editora
Iberoamericana. 2010. (222 páginas).
Los dos tratados son derivaciones de su tesis
doctoral aprobada en la Universidad Católica Argentina, UCA.
No hay comentarios:
Publicar un comentario